El piloto argentino Franco Colapinto expresó su malestar con su desempeño en el Gran Premio de México, donde logró llevar su Alpine al 16° puesto, señalando que se sintió “arrastrándose” durante las 50 vueltas de la carrera.

El corredor de Pilar se mostró especialmente frustrado por la estrategia planteada por su equipo, la baja adherencia de los neumáticos duros y la maniobra de Lance Stroll, piloto de Aston Martin, quien lo obligó a salirse de la pista en la primera vuelta.

De cara al próximo Gran Premio de Brasil, que se disputará el domingo 9 de noviembre, Colapinto destacó que será “una fiesta” y que tiene “muchas ganas de ir”, dado que lo considera su Gran Premio local.

Con su característico aplomo, Franco Colapinto atendió a los medios para analizar lo que fue una carrera para olvidar en el Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México.

“Fueron 50 vueltas arrastrándome”, empezó a describir el argentino, quien sostuvo que los neumáticos duros no ofrecían “ningún agarre”, haciendo de la carrera una “experiencia interminable y sin ritmo”.

Su única parada en boxes se produjo tras 50 vueltas, momento en el cual se cambió a neumáticos blandos, los cuales consideró que le ofrecieron un mejor rendimiento, aunque “ya no había tiempo” para mejorar su posición, en un Gran Premio que fue “muy difícil” para el equipo.

Tras el cambio de compuestos, Colapinto salió de los pits en la 16° posición, la última, debido a algunos abandonos, pero aún así era considerablemente más rápido que su compañero de equipo Pierre Gasly, aunque no pudo adelantarlo debido a la salida de un Virtual Safety Car a dos vueltas del final. El pilarense está “100% seguro” de que, sin ese incidente, habría superado al francés.

Aparte de la falta de velocidad, los problemas para el piloto de 22 años comenzaron desde la primera vuelta, cuando un error de Stroll lo obligó a salir de pista, tocando el césped y perdiendo adherencia, lo que lo hizo trompear.

Respecto al canadiense, Colapinto no tuvo reparos en criticarlo, asegurando que “nunca mira los espejos” y que “siempre hace lo mismo”, aunque también subrayó que pudo recuperarse rápidamente de la pérdida de tiempo.

Finalmente, el ex piloto de Williams se refirió a lo que será su “Gran Premio en casa” en Brasil, el 9 de noviembre, afirmando que está “muy emocionado” por la cantidad de argentinos que habrá, y expresó su deseo de “disfrutar con ellos y darles un buen resultado”. Con algo de humor, agregó: “Lo bueno es que peor no se puede ir”.

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