Los miembros de la Comisión de Presupuesto y Hacienda resolvieron este lunes ratificar al diputado de La Libertad Avanza Alberto “Bertie” Benegas Lynch al frente del cuerpo. En paralelo, el oficialismo busca acelerar el tratamiento del Presupuesto con la intención de emitir dictamen este martes y, si las negociaciones lo permiten, lograr su aprobación antes de que termine la semana, aunque el diálogo recién comienza.
El economista fue impulsado para renovar su mandato por el salteño Carlos Zapata. A su vez, el jefe del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, le deseó éxito en su función, aunque recordó con ironía que su antecesor, José Luis Espert, había dejado “la vara muy baja”.
Unión por la Patria mantuvo en reserva el nombre para la vicepresidencia primera. En tanto, se confirmó la continuidad de la porteña Daiana Fernández Molero (PRO) como vicepresidenta segunda, mientras que el salteño Julio Moreno Ovalle (La Libertad Avanza) asumió como secretario segundo.
La comisión volverá a reunirse este martes a las 12 para avanzar con el dictamen del Presupuesto. Además, a las 15 habrá un plenario con la Comisión de Legislación Penal para firmar despacho del proyecto de Ley de Inocencia Fiscal, iniciativa que apunta a blanquear dólares no declarados.
No obstante, fuentes parlamentarias señalaron a la Agencia Noticias Argentinas que el proyecto presupuestario aún presenta varios puntos sin cerrar y que, en el mejor escenario, podría dictaminarse recién durante la tarde del martes, junto con la Ley de Inocencia Fiscal.
En los pasillos de Diputados se vio al ministro del Interior, Diego Santilli, quien se instaló en el Congreso para agilizar las conversaciones con gobernadores y bloques dialoguistas, manteniendo encuentros con distintos referentes. En la reunión de Presupuesto prevista para el mediodía también podría avanzarse con el dictamen de la Ley de Compromiso Nacional por la Estabilidad Fiscal y Monetaria, que propone sanciones a funcionarios que incumplan la regla fiscal o promuevan prácticas distorsivas mediante la emisión.
Germán Martínez reclamó que este último proyecto también sea girado a la Comisión de Legislación Penal, al considerar que incluye artículos de carácter penal. Desde Unión por la Patria adelantaron que no acompañarán la iniciativa, que además genera reparos incluso entre algunos aliados habituales del Gobierno.
“Si en la Argentina se desata una crisis económica similar al efecto tequila, esta ley impone un corset imposible de sostener”, advirtieron desde ese espacio. Además, Unión por la Patria presentará dictámenes propios para cada proyecto. En el caso del Presupuesto, retomará como base el dictamen de minoría firmado el 4 de noviembre, con algunas modificaciones.
Desde el bloque peronista reconocieron que buscan mantener la cohesión interna, aunque admitieron la posibilidad de alguna disidencia puntual. Aun así, su fuerza no alcanza para frenar el avance oficialista: La Libertad Avanza cuenta con 20 de las 49 bancas en la comisión y, al sumar a aliados del PRO, la UCR, el MID, Innovación Federal, Independencia y Elijo Catamarca, llega a 28 firmas.
El poroteo
Del lado opositor se ubican Unión por la Patria, con 18 integrantes, y la alianza Unidos —integrada por Provincias Unidas y otros bloques—, que todavía no definió a sus tres representantes como señal de protesta por la escasa representación asignada en la comisión.
En nombre de Unidos, el diputado de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro cuestionó la “decisión arbitraria” de quitarle a ese espacio uno de los cuatro lugares que, según sostuvo, le correspondían. “No cedieron nada, como se hacía tradicionalmente”, reprochó, al comparar su representación con la del interbloque PRO-UCR.
En defensa del oficialismo, Silvana Giudici explicó que no se utilizó el sistema D’Hont sino otro criterio de representación proporcional, y aseguró que Provincias Unidas está correctamente representada con tres integrantes. “No vemos ninguna irregularidad”, afirmó, al recordar que ese interbloque tiene actualmente 21 diputados, ya que Juan Schiaretti aún no pudo asumir.
Ferraro respondió que esa observación era una “bajeza”, dado que el exgobernador se encuentra recuperándose de un problema de salud. Más allá de la polémica, Provincias Unidas ya definió a sus representantes: Nicolás Massot, Ignacio García Aresca y Jorge “Colo” Rizzotti.
Desde el kirchnerismo señalaron que la integración de la comisión debió haberse realizado mediante el sistema D’Hont, lo que —aseguraron— habría evitado perjuicios a bloques como Provincias Unidas o el Frente de Izquierda, que quedó sin representación pese a contar con más diputados que otros espacios.
“El oficialismo no negocia. Podrían haber compensado a Provincias Unidas con lugares en otras comisiones, pero no lo hicieron. Antes, estas cosas se discutían”, comparó un diputado opositor.
Pese a las tensiones, el Gobierno se muestra confiado. Todos los bloques, incluso Unión por la Patria, coinciden en que no hay margen para que el país vuelva a quedarse sin Ley de Presupuesto en 2026, como ocurrió en los primeros años de la gestión de Javier Milei.
Sin embargo, persisten varios puntos abiertos. El PRO reclama la restitución de la coparticipación para la Ciudad de Buenos Aires y una distribución más equitativa del impuesto a los combustibles líquidos, bajo el argumento de que las provincias deben asumir la obra pública ante el retiro del Estado nacional.
Por su parte, sectores como el radicalismo mendocino esperan que el Gobierno incluya en el proyecto los avales necesarios para que las provincias puedan endeudarse. También solicitan un sistema de compensaciones para las jurisdicciones que no tienen deuda, como Mendoza, La Pampa y Santa Fe.
IDC

